miércoles, 16 de febrero de 2011

L I B R E S ????????????????????????????????

Sin colorantes ni conservantes

Sí, me gusta conducir descalzo, pedir la mano a las maníquis de los escaparates y bailar con ellas un vals, pararme en los escaparates de las agencias de viaje e imaginar un cambio de vida a alguna ciudad soñada que durará tan solamente unos minutos, tumbarme en la bañera repleta de agua y jabón y ponerme una gran barba como Papa Noel , también mirarme al espejo del ascensor cada mañana y sacar los dientes ( es un secreto , no se lo digas a nadie), pasear por la ciudad a altas horas de la madrugada , comerme el fuet a bocados . También me gusta hacer feliz a los demás , quizás sea eso lo que verdaderamente me hace feliz. Soy imprebisibley a venturero , y si , tengo un gran sueño. Sueño con vivir algo trepidante , si , algo que no me deje dormir , que no me quite la sonrisa de la boca.

ESPERPENTO


Me gustaría estar loco , si oyes bien , loco para poder disfrutar de una simple piruleta , del revoloteo de las alas de una mariposa , de abrir y cerrar una persiana y ver como la luz me ciega. No ser consciente de las miserias , de la falta de labor de los políticos , de saber que hay gente que se va a la cama sin cenar , sin ilusiones sin sueños

Si

Quiero abrir los ojos todas las mañanas y verte a mi lado. Quiero hacerte el desayuno los domingos. Quiero que hagamos una lista con todo lo que nos hace falta y ir a comprar al supermercado a principios de mes. Quiero esperar a que vengas de trabajar y contarnos las anécdotas del día. Quiero quedarme dormida en el sofá y que me acaricies el pelo. Quiero discutir contigo por una tontería. Quiero que los días que te toque madrugar más que a mi, me des un beso en la frente antes de marcharte mientras yo me hago la dormida. Quiero visitar contigo ciudades extranjeras. Quiero hacerte un millón de fotos y quiero contarte cómo me gustaría decorar nuestra habitación. Quiero ir a dar uno de mis paseos por la playa a las 9 de la noche en invierno. Quiero que te enfades conmigo y me mandes a dormir al sofá, y volver a la habitación a las 4 de la mañana, tropezar con un armario, y meterme en la cama como que no ha pasado nada, mientras tú haces como que sigues dormido y sonríes. Quiero hacer un planning con las tareas de la casa que nos tocan a cada uno, y que ninguno de los dos queramos planchar. Quiero oír un "te falta mucho" acompañado de golpecitos en la puerta del baño. Quiero gritarte un "¡¡sorpresa!!" el día de tu cumpleaños mientras intento que no descubras cuál es la sorpresa. Quiero cuidarte cuando estés enfermo y quiero que me odies de vez en cuando por poner esa música que sólo te gusta a ti mientras te saco la lengua y hago un intento de bailar. Quiero indignarme por cualquier tontería y quiero que me abraces muy fuerte y no me sueltes nunca. Yo no te soltaré. Sólo quiero abrir los ojos cada mañana verte a mi lado, lo demás es de relleno

miércoles, 15 de diciembre de 2010

Faro de Guia II

Yo siempre he sido flaco, no muy agraciado, simpático, bondadoso y un gran experto en perder batallas y sueños. Desde pequeño me ha gustado escribir y seguir a aquellas personas únicas, diferentes, que dotan de sentido a esta vida. Jamás pensé que aquella joven de melena corta, con un sueño imposible por realizar, fuera a llegar a tener 30 años y estar viviendo la vida que siempre soñó. Yo la seguí, nunca me separe de ella, la apoye, baile junto a ella, llore y compartirnos más de una noche en los lugares más destacados del momento.
Pocos creyeron en ella, en su sueño. Sin embargo ella peleo, lucho y consiguió vivir lo que desde joven, dibujaba y escribía en la cama de su habitación, vivir en un faro junto al mar. La tacharon de loca, de caprichosa, pero no la importo, dejo una carta para sus padres, con especial mención a su padre:
- Siempre seréis lo más importante para mí. No importa la distancia ni el lugar del mundo donde estemos, recordar lo que siempre me decía papa: vive tus sueños, yo luchare día a día porque se hagan realidad. Me enseñasteis a ser persona, a luchar por lo que quería, siempre respetando a los demás. Ha llegado el momento de vivir como siempre he querido hacerlo y os doy gracias por todo lo que habéis hecho por mí. Papa, mama os quiero.
Seguí pensando día a día en ella, recordando la frase que un día no dijimos, que al menos debíamos pensar el uno en el otro un minuto al día. No era una historia de amor, sino devoción, como el amor que se siente a alguien que siempre has admirado y por el que darías todo sin ninguna explicación.
Decidí visitarla, no quería perturbar su intimidad, por lo que decidí alquilar una pequeña habitación en un hostal cercano al faro. No la avise de mi llegada, no quiero perder más tiempo en relatar lo que pude ver. Ninguna palabra podrá describir esa imagen y esa sensación de felicidad que aquella mujer me transmitió:
Apenas había salido el sol y ella ya estaba despierta, desayunaba viendo el amanecer. No lucia biquini, como los primeros turistas que visitaban la playa. Un vestido de paño blanco, decoraba su figura aniñada. No había perdido el brillo en los ojos, a su lado no había nadie, pero ella dedicaba sonrisas al sol. Aprendió a pescar, era maravilloso contemplar a una joven, vestida como las demás de los años 20 que recorrían el Paris céntrico, luchar por conseguir pescado fresco. Los días que no había suerte acudía al pueblo, donde su llegada atraía las miradas y los sueños de los jóvenes del lugar. Estos en más de una ocasión habían soñado con pasar una sola hora con ella en el faro. Desde que llego a este, había estado sola, necesitaba un tiempo para pensar, para volver a ser lo que era. Comenzar una nueva vida de entrega, de ilusión, no dejo de escribir a sus compañeras de batallas, aquellas con las que compartió ilusión, amores, que entendieron y respetaron su decisión.
Por la tarde se tumbaba al sol y dejaba que los rayos se incrustasen en su piel suave, aromática, agradable a la vista, que poco a poco se estaba convirtiendo en dorada. Aguardaba al atardecer y tarareaba siempre la misma canción: probablemente no encontremos el camino, pero nos sobraran las ganas de volar. En estos momentos ella si había encontrado el camino, vivía como siempre había soñado en el lugar ideal rodeada de paz, de tranquilidad, de la armonía con la que siempre soñó.
Tras un largo día, comenzaba su trabajo en el faro. Como cada noche se disponía a dar luz a aquellos barcos que llegaban a puerto. Todo transcurría con aparente normalidad, los primeros barcos llegaban a puerto, pero en la lejanía vio algo. Una pequeña balsa de madera y una bandera con un símbolo de la paz se acercaba. Parecía vacía, tanto le sorprendió que bajo de lo alto del faro y se dispuso a ver que era aquello. Su sorpresa fue al ver a un joven rubio, con una barba muy espesa y larga, descuidado y algo sucio que al ver su presencia, se quedo helado. La joven se quito el abrigo y se lo puso, el joven no había articulado aun palabra, movió ligeramente su cabeza en señal de agradecimiento. Una vez en los aposentos del muro, la joven le ofreció algo de comida, que el intrépido de melena rubia, devoro sin soltar ni una palabra. Silvia, que era el nombre de aquella chica, le pregunto que como había llegado hasta allí y cuál era su nombre. El tardo unos segundos en contestar, pero su respuesta cambio la vida de ella para siempre:
La vida nunca me trató bien, pelee, luche por mis sueños, pero nunca nada se hizo realidad. La gente que me rodeaba lo tenía todo, sin ningún esfuerzo, sin luchar por ello, me canse de vivir en un entorno así. Nadie tenía una aspiración, todo era monotonía, nadie aspiraba a conseguir un sueño imposible. Decidí que debía dar un rumbo de 360 grados a mi vida. Construí la pequeña balsa que viste y me adentre mar adentro. Viaje por numerosos lugares del país, visite muchos faros, en todos ellos viejos ancianos, llevaban el oficio con agonía sin pasión. Hace unos días vi tu faro, me sorprendió, creí que era una ilusión. Nunca pude pensar que una chica quisiera vivir en un lugar así. No me atreví a acercarme, hasta que tú me has visto hoy. Llevo 245 días en el mar, pasando frio, calor, mojado por la lluvia y por las olas, nadie ha sido capaz de preguntarme si necesitaba algo. Tú sin conocerme me has ofrecido comida, tu abrigo, tu casa. Todos los momentos malos de mi larga vida, han merecido la pena por tan solo estos segundos. ¿Podríamos compartir el sueño juntos?

Abandone mi vida, por encontrar algo que me hiciera sentir feliz. Aquí lo he conseguido, siempre me ha faltado algo, alguien que compartiría mi sueño, que no necesitara más de una mirada para conocerme, para saber lo que pienso y en tan solo estos minutos me he dado cuenta de que solo en un lugar así lo podría encontrar. Hoy a las 4:56 AM de un martes 14 de julio de 2021 creo que lo he encontrado.
ERES TÙ

viernes, 5 de noviembre de 2010

Vestido rojo

Su paso por el mundo era firme, seguro, algunos hablaban de pasos de baile en cada uno de sus movimientos. Cada vez que su sonrisa salía a la luz, producía terremotos en los corazones de los jóvenes que la observaban desde la oscuridad. Como decía Sabina en su boulevard de los sueños rotos, se dejo el corazón en Madrid.
Parecía implacable, incluso fría, sin embargo pocos conocían sus verdaderos sentimientos ante la vida, sus sueños o aquellos momentos de éxtasis que a través de pensamientos invadían su mente de viajes, descubrimientos y locuras pasajeras.
Su trayectoria vital hasta el momento se había basado en momentos efímeros de felicidad. Los hombres que llegaron a su vida nunca lucharon por hacer de ella una mujer feliz, desecho cualquier tipo de noviazgo y vivió siempre con la noción de que ella jamás conocería a nadie que lograra atraparla.
Muchos somos los que rechazamos el compromiso, los que de una u otra manera no queremos anclarnos a alguien, sin embargo anhelamos todo lo contrario.
Los sucesos recientes en su corazón, la hicieron cambiar de opinión. Por primera vez en su vida, su cabeza no estaba despejada, en ella rondaba la figura de un joven atractivo, inteligente, que había logrado algo inaudito en ella.
Cada noche desplazaba la colcha de su cama, se arropaba y dedicaba los 5 últimos minutos de su día a reflexionar acerca de lo vivido durante la jornada. En las últimas semanas más de la mitad de ese tiempo llevaba un nombre propio. Tras varios días, tomo una decisión, debía afrontar sus sentimientos y arriesgar por una vez.
Su visión negativa de la vida, desapareció, acudió a su armario y decidió estrenar aquel vestido palabra de honor, que le asemejaba a aquellas estrellas del celuloide que paseaban por la alfombra roja. Eligio un collar de perlas, a juego con unos pendientes, se atuso el pelo y tomo el camino que separaba su casa con respecto a la de aquel joven.
Durante el trayecto pasaron mil sensaciones por su cabeza: vergüenza, volverse a su casa, miedo, que pronto desaparecieron. Con su dedo corazón pulso el interruptor del piso del joven y este apareció por el portal en menos de dos minutos, que parecieron dos horas para ella.
- ¿Que haces aquí a estas horas?
- ¿Me regalas tres minutos de tu vida? Por favor. no digas nada hasta que termine.vale.
- Acepto.
- Haz memoria, piensa que tienes 8 años. Recuerda eso con lo que siempre soñastes, pongamos como ejemplo aquel muñeco que era capaz de soltar agua por la boca. Esa sensación de deseo, de necesidad, algo así es lo que me esta pasando a mi contigo. Necesito ser totalmente feliz y creo que tu eres la única persona que puedes conseguirlo. Que te parecería si cada uno continuase su vida, con la única diferencia de que esta sea repleta de aventuras . Estoy dispuesta a luchar contigo por conseguir nuestros sueños, por despertar cada día y tener una razón por la que sonreír. Porque cada momento sea diferente, porque nos de igual el que dirán, las miradas de recelo, porque solo con una mirada seamos capaces de entendernos.
- No solo eso, estoy dispuesto a vivir así desde este mismo instante. Esta misma noche estaba pensando que seria el hombre mas feliz del mundo, si pasara algo como lo que esta pasando. Maldigo el tiempo perdido, aprovechemos este momento y recuperemos el tiempo perdido. ¿Hay algo que podamos cumplir ahora, a la 1 de la mañana, que siempre hayas querido hacer?
- Se me ocurre algo, necesitaremos dos cucharas, un gran helado y andar 10 minutos hacia el aeropuerto. ¿Que te parece ver despegar los aviones e inventar el destino y las sensaciones de los pasajeros al emprender un nuevo viaje quizás en busca de la felicidad o reencontrarse con aquel familiar que hace que no ven años?
- Me parece que eres fascinante.







El miedo al fracaso nos impide atravesar fronteras que delimitan el desarrollo integro de nuestras vidas. No estoy dispuesto a que ninguna persona a la que quiero, tenga miedo a perder o la sensación de que no puede conseguir cualquiera de sus deseos. Si en mi mano esta, luchare para que todos tus sueños se hagan realidad.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Guion del corto

Una joven pierde la vision , con el sueño de visitar Madrid . La vida le da un cambio drástico al conocerle a él, deseoso de hacer feliz a los demás. Con su toque bohemio le presentara la ciudad con un toque muy pintoresco.
Madrid Estación de Atocha
11 A.M
-¿Qué ves?
-Veo todo menos el cielo. Nos rodea una gran cúpula, gente corriendo de un lado para otro. Su cara no es de felicidad, sino de trasiego, no disfrutan de esta situación. Se puede ver en muchos de ellos la sensación de estar perdidos, de no saber a dónde ni cómo ir, hipnotizados. Un niño llora al ver como la piruleta que tenía en la boca, cae sin querer a la vía del tren.
Dos escaleras conducen a la frontera entre la ciudad y el posible viaje a algunas de las ciudades de España.
-Abro una puerta y me enfrento a una ciudad frenética, habrás comprobado el ruido de los autobuses y taxis cercanos, no sé si has conseguido percibir el olor del aceite requemado, están haciendo churros.

Museo Reina Sofía
Piensa en: modernidad, sueño, colores, vanguardia. ¿Estás preparada? Su fundación es paradójicamente reciente, nunca fue concebido como un museo, sino como un sanatorio. Su ascensor exterior da la imagen de un paso hacia una nueva dimensión, donde el arte y las sensaciones se funden, transportándonos a épocas tan dispersas como la Guerra Civil Española o el Manhattan de los años 70. Se palpa el toque francés, gracias a la ampliación de Jean Nouvel, que doto de sofisticación y utilidad los alrededores del museo, con una biblioteca siempre repleta de cerebros en funcionamiento quizás con aluna de las ideas que revolucionaran el arte y la cultura de esta ciudad.

El Retiro
Un largo camino nos lleva a un lugar cubierto de cristal, su puerta esta cerrada. Si se abriera miles de sueños saldrían a la luz.
Gente de todo tipo: artistas callejeros , ciclistas principiantes con cara de agotamiento , jóvenes parejas deseosas de pasión y carentes de un lugar donde poder llevarla a cabo, familias enteras repletas de ilusión ante un gran día todos juntos y nosotros deseosos de descubrir.

Gran Vía
Imagina un lugar lleno de coches , largas aceras a un lado y otro de la carretera, vagabundos en los soportales , vendedores ambulantes de todo tipo de productos, edificios solemnes testigos de grande historias que miran asombrados el ritmo vertiginoso y trepidante del día a día. La puerta de un edificio se abre, necesitó narrártelo es una de las imágenes más bellas que jamás he visto.
Dos jóvenes ataviados de una cazadora de cuero, jersey de lana él y un vestido rojo cubierto de un abrigo largo blanco ella, se disponen a salir bajo el intenso frío que estamos soportando .Él la está colocando sutilmente un gorro fino, intentando no despeinar el fino y brillante pelo de ella. La cara de ella refleja felicidad, no sonríe, pero su mirada lo dice todo. Acaricia su mejilla, arrastra su flequillo y la eleva con un beso hacia el aire. Corren, se persiguen el uno al otro y se mojan, la lluvia humedece el pelo de ambos.
Los peatones les miran comentando con sus acompañantes la locura de esos jóvenes, en su interior aparece la visión de que ellos nunca vivieron algo igual, muchos se lamentan del tiempo perdido y las acciones que pensaron y que nunca pusieron en práctica.